En el artículo -Las
materias primas son una ruleta rusa para las marcas económicas-
hacíamos referencia a las probabilidades de errores ocultos en los aparatos
provocados por materias primas de bajo estándar y la falta de conocimientos que
sobre el tema tenemos, sobre todo de los plásticos. Y no es para más, los
plásticos son casi una carrera universitaria.
Desde que trabajo, gestiono,
testeo y controlo producciones low cost siempre vivo en la incertidumbre con
cada producto final sobre comportamiento futuro de sus plásticos. Es algo que
casi no puedo controlar a no ser que cuente con recursos para ello. He visto y
tengo registrado decenas de eventos en varios tipos de aparatos que fallan por
sus partes plásticas de forma prematura, ya sea por desgaste, cristalización o
partiduras.
Pero faltan aún decenas de
situaciones por presentarse que somos incapaces de imaginar. De eso estoy
seguro. El siguiente caso es un ejemplo: Un Horno de convención por aire
caliente cuyo lote tuvo que ser retirado de la venta por un vástago plástico de
apenas 5cm.
Horno de convención por aire caliente. Foto del autor. |
ANTECEDENTES.
Se seleccionó a un fabricante
con el que ya teníamos otras producciones a la venta para producir un Horno de
convención por aire caliente. El testeo de las muestras fue positivo y el
aparato cumplía con nuestras especificaciones. La relación costo-funcionalidad-durabilidad
cumplía los estándares del bajo costo.
Al salir a la venta el lote
comenzaron de inmediato las incidencias en las redes de asistencia técnica. El
defecto reportado era que el control de temperatura no accionaba, el cliente no
podía regular la temperatura del aparato a la tercera o cuarta vez de su uso.
Al buscar la causa los técnicos detectaron que el vástago plástico para que el
botón del control de temperatura accione sobre el termostato estaba derretido y
deformado por lo que no ejercía ninguna acción.
Vástago deformado. Foto del autor. |
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Así fue llegando uno a uno cada aparato. El mismo defecto y la
misma causa. Evidentemente estábamos en presencia de un problema masivo en el
lote. No había más opciones, había que retirar el lote de la venta y hacer la
devolución del efectivo a los clientes que ya habían comprado el aparato pues
el problema se les presentaría en cualquier momento. Una vez más, una pieza
plástica nos pasaba factura.
Quizás te estés preguntando
varias cuestiones que voy a ayudarte a responder.
La muestra de evaluación no
presento el problema. ¿El fabricante cambió la pieza en la producción?.
Evidentemente si, pero a la vista plástico por plástico es plástico por lo que
una inspección de producción o una pre-embarque no lo puede determinar a simple
ojo. Por demás, tampoco era un punto a supervisar pues no teníamos documentado
ese problema.
¿Los puntos de controles de
calidad en la línea de producción no detectaron errores en el funcionamiento
del aparato?. No, el fallo se producía cuando el horno llevaba un tiempo
funcionando. Primero se debe calentar el plástico y después deformarse por lo
que ese tipo de falla solo se detecta durante la explotación del producto y no
durante la revisión de su funcionamiento en los puntos de control de la línea.
¿El producto no tuvo pruebas de
vida que previeran malos comportamientos ocultos? No, cuando se trabajan líneas
low cost muchos importadores obvian pasos para no afectar los costos.
Prueba de temperatura en el interior del aparato en funcionamiento. Puede alcanzar los 103 grados C y sin embargo el vástago comienza a deformarse a los 100 grados C. Foto del autor. |
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Prueba de temperatura realizada al vástago del termostato de una plancha de ropa enviada al fabricante como constancia de su resistencia. La pieza soporta casi los 200 grados C. Foto del autor |
LA RECLAMACIÓN.
Al fabricante se le envió un
reporte con las mismas imágenes de las pruebas que puedes ver en el artículo.
Era contundente la definición del problema. Además teníamos la muestra de
evaluación con la que podían comparar ambas piezas. Evidentemente la materia
prima con que conformó esa parte era pésima o no era la adecuada para esa pieza
y el fabricante lo justificó aduciendo que esa parte la compraba a un tercero.
El productor se comprometió en
suministrar todas las partes necesarias para la sustitución de esa pieza y
volver a vender el producto pre-reparado, no sin antes enviar para nuestro
testeo y aprobación diferentes muestras de vástagos.
ENSEÑANZA.
- Los fabricantes low cost no
controlan la calidad de las materias primas, partes y componentes que
adquieren de terceros.
- Cuando trabajas bajo costo
las partes y piezas también lo son.
- Para trabajar líneas low
cost es muy importante tener la retroalimentación del comportamiento de
productos anteriores y similares. Ello permite establecer los puntos de
control de la calidad que sean más críticos para el producto.
- Las inspecciones de
producción, las pre-embarque y las pruebas de vida son elementos a tener
en cuenta para adelantarnos al comportamiento de un producto.
Espero que esta información te ayude de
alguna forma. Si has tenido experiencias de este tipo o tienes opiniones que
intercambiar te invito a que dejes un comentario.
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